La historia del funicular del Pic du Jer
La construcción de una basílica sentada por la diócesis de Tarbes a raíz de las apariciones marianas a Bernardita en 1858, ocasionará la venida de numerosos peregrinos a Lourdes.
El ferrocarril llega a Lourdes el 9 de abril de 1866 y la afluencia de peregrinos no dejará de incrementarse.
Por tanto, es normal que se valorice el potencial turístico de la región y se aprueba la idea de un funicular que dé acceso a la cima del Pic du Jer desde Lourdes.
Las obras comenzaron en agosto de 1898 y se terminaron 15 meses más tarde en diciembre de 1899. El funicular, diseñado por el ingeniero Chambrelent, se puso en funcionamiento el mes de mayo de 1900.
Su inauguración se llevó a cabo en junio del mismo año.
La rapidez de la ejecución de las obras se debió a la presencia de un portador aéreo que transportaba hasta 50 toneladas diarias de piedras procedentes de la cantera del Petit Pic du Jer.
Todos los escombros procedentes de los túneles y de la zanja fueron retirados en carretillas o con palas y acumulados en terraplenes sobre las laderas de la montaña. Para economizar la mano de obra, se duplicó la carga normal de dinamita. Así, los escombros salían proyectados a ambos lados sin esfuerzo humano.
La Compañía del Funicular del Pic du Jer disponía de una concesión de 75 años, la cual fue prolongada debido a la guerra, posteriormente el ayuntamiento de la ciudad de Lourdes recuperó su haber en 1986, que actualmente regenta un organismo municipal.
Ficha técnica:
Longitud de la vía: 1110 m, pendientes del 28% al 56%
Ancho de vía: 1 m
Altitud estación inferior: 450 m
Altitud estación superior: 888 m
Desnivel: 438 m
Dos túneles de 70 y 65 m cavados en la piedra caliza compacta La zanja mide 400 m de largo por 10 m de profundidad
El viaducto consta de 12 arcos, 200 m de largo, 4 m de ancho, 18 m de alto.
Motor eléctrico de 185 caballos situado en la estación superior. Cable: 1155 m de largo
Dos cabinas: peso vacío 5500 kg capacidad 80 personas Duración del trayecto 6/10 minutos, velocidad máxima 11 km/h
¿Sabía que...?
El funicular, del latín “funiculus”, es decir “pequeño cordel”, es una invención del ingeniero Stephenson en 1825 que lo ideó para ayudar a las locomotoras de vapor a tramontar las pendientes de las colinas inglesas